David R. Hawkins, psiquiatra,
americano, investigador, creador del llamado "mapa de la conciencia
humana" hace una medición de los estados de ánimo de las personas y
sus correspondientes estados de conciencia y resultados de vida. Este
mapa permite reconocer como, según la vibración desde donde emitamos nuestros
pensamientos y acciones , obtendremos resultados concordantes.
Cada puntaje conlleva una visión de Dios, de la vida,
una emoción predominante y un proceso característico de la persona.
Es interesante revisar dónde estamos y como,
obviamente podemos ascender en este mapa y elevar nuestra felicidad, calidad de
vida y resultados diarios:
El mapa
de la consciencia y los dualismos
En el
1996, Hawkins publicó su primer libro, “El poder contra la fuerza” en el cual
propone una escala de consciencia, que va de 0 (muerte) a 1000 (conciencia de
Jesús, Buda, la conciencia más alta posible de vivir como humano).
Hay
varios niveles de consciencia, y corresponden con ciertas emociones, ciertos
filtros de percepción, y además, ciertos niveles de energía. Cada nivel encima
de otro soluciona el límite del anterior y propone otro reto de crecimiento.
Cuanto más bajo el nivel de consciencia, menos energía, más pensamientos
negativos y más emociones negativas. Además, cuanto más bajo, las
experiencias que vivimos y la realidad que experimentamos es más destructiva,
más negativa. Hay más enfermedad, más carencias. Hawkins destaca una y otra
vez, que ningún nivel es “mejor” que otro. Todos son una forma que puede
tomar la consciencia, todos simplemente son. Tal como funciona la
mente, siempre crea dualismos entre “bueno” y “malo”, y en cada nivel más
alto identificamos un dualismo como ilusión y nos encontramos con otro. Por
ejemplo, en el nivel de miedo, temamos que algo pueda pasarnos, puede ser una
enfermedad. Y lo bueno es, visto en el nivel de miedo no ser víctima de la
circunstancia que nos pueda traer una enfermedad. Entonces el dualismo es
entre lo que temamos versus lo que no temamos. En el nivel superior, deseo, ya
no nos preocupamos tanto por lo que pueda pasar a nosotros, ni por asegurarnos
que no pase, sino ponemos nuestros esfuerzo para conseguir lo que deseamos,
salud. Entonces el dualismo está en lo que deseamos versus lo que no deseamos.
Falsedad
versus integridad
En la
escala hay varios puntos clave que tienen importancia para el
crecimiento y para ponerse bien. Primero, el nivel de los 200. Hawkins
dice en el Poder versus Fuerza: “Todos los niveles bajo 200
destruyen la vida a la larga en el individuo y en la sociedad; todos los
niveles sobre 200 son expresiones constructivas de poder. El nivel
decisivo de 200 es el que divide las áreas generales de la fuerza y el
poder.”
Por
debajo de 200, la dirección en la consciencia es destructiva, negativa, no
íntegra. Hawkins llama estos niveles de consciencia “grados de falsedad” como
contrastado con los “grados de verdad” por encima de los 200. En los niveles de
vergüenza, culpa, apatía, sufrimiento/tristeza, miedo, deseo, enfado y orgullo,
siempre proyectamos la “causa” de nuestro sufrimiento hacia fuera. Nos sentimos
víctimas, sin poder, frustrados. Por ejemplo, cuando estoy triste, siento
pérdida de algo, o tristeza porqué algo no es de otra manera. Si este
algo (fuera de mi) fuera diferente, podría estar feliz o contenta, así lo dice
el razonamiento. O luego en miedo, con el ejemplo anterior, si por fuera
no hubiera condiciones contagiosas, podría estar tranquila y sin
ansiedad. O, en enfado, si el otro no me tratara con tan poco respeto,
podría estar bien. Por debajo de 200 solimos sentir que estamos sujetos a las
emociones y que no podemos cambiarlas. Cuando en un tema llegamos a “pasar” por
los 200, tomamos responsabilidad. En la psicología, este cambio se llama “locus
interno de control” – sentimos que las cosas son como son, no nos hace falta encontrar
“un culpable”, sino nos definimos a nosotros mismos como responsable y como el
único que puede cambiar algo.
Linealidad
versus subjetividad
Otro
punto de cambio importante es de los 400 a los 500. En 500, el nivel de amor,
la razón y la lógica se sustituyen por amor. El nivel de los 400 siempre busca
la razón de algo para cambiar el efecto. Analiza y quiere entender. Es el nivel
de la investigación, de la ciencia, del conocimiento. Todos los investigadores
grandes, los intelectuales de la historia, se encontraron en promedio en este
nivel. Los mejores entre ellos, en 499. Cuando la razón se frustra porque
no encuentra respuestas, cuando la forma de pensar de “causa y efecto” ya no
nos da respuestas, es cuando entramos en el reino de la fe, del amor, de la
intuición – todas cosas que no se puede “comprobar” y que son subjetivas. Es
encima de 500 donde se encuentran las emociones de compasión con la condición
humana, de perdón, de amor y por supuesto , la felicidad !