Como se evoluciona por medio de estados de Conciencia? Existen las llamadas dimensiones?
Las dimensiones son los diferentes
estados de la existencia que experimentamos durante el camino hacia el Ser
Único. Es decir son los pasos evolutivos que el Ser decidió experimentar para
regresar a la fuente divina. Todos los niveles dimensionales se encuentran en
el aquí y el ahora, la diferencia es la longitud de su onda o frecuencia. Las
dimensiones son frecuencias dentro de la cual vibramos, también son podríamos
decir niveles de conciencia, son algo parecido a las bandas de radio con sus
frecuencias y estaciones. Existen siete dimensiones perceptuales que se
corresponden a la octava dimensional donde se encuentra la Tierra en estos
momentos. Igualmente existen otras dimensiones que se corresponden a otras
octavas vibratorias que se encuentran actualmente fuera de nuestra comprensión
humana.
Sin embargo cambiar de dimensión significa expandir
nuestra conciencia, es famosa la historia del personaje animado que vivía en un
papel y cuyo mundo era totalmente bidimensional o plano, así su cerebro había
aprendido que así era su realidad formada por puntos y líneas sobre un inmenso
plano blanco. Era Inconcebible para el pensar en objetos con volumen o
tridimensionales. Así es para nosotros un imposible desde nuestras creencias,
pensar el realidades que no sean la conocida, ya que nuestro cerebro está
entrenado a percibir de una manera determinada. Entonces, cambiar de dimensión
es expandir nuestra forma de percibir la realidad, de ver las cosas. Ahora nos
encontramos pasando a una realidad más energética, que se parece más al mundo
de los sueños y la imaginación.
A pesar de las mismas clasificaciones son lineales , esta forma de entender las dimensiones puede ayudarnos a comprenderlas y tanto si crees en ellas o no , expandir la Conciencia es una tarea honrosa siempre.
La Primera dimensión: Es
la encargada de convertir a la energía en materia, es la frecuencia básica de
los átomos y las moléculas, por lo tanto es la dimensión del microcosmos, es la
frecuencia vibratoria de activación del ADN. Se puede decir que maneja un nivel
de consciencia elemental referido al cumplimiento de funciones, o sea una
consciencia puntual, sabe cómo dirigirse de un punto a otro. Los minerales y el
agua vibran en esta frecuencia, los minerales son el aspecto cristalino de la
misma, el agua el aspecto liquido de la misma. Se encuentra en los fluidos y
las corrientes eléctricas del cuerpo humano, activa el código genético e
impulsa energéticamente el sistema celular. Si tomáramos como metáfora al ser
humano para describir las dimensiones, podríamos decir que la primera dimensión
la experimentamos en la etapa “pre fetal”, donde somos un conjunto de
potencialidades con un programa de división celular y mantenimiento de
funciones. Todas las dimensiones funcionan a todas las escalas y las de esta
octava son las mismas en todo el universo.
La Segunda dimensión: Es
la frecuencia donde existen la mayoría de los animales y las plantas. Es
también física e impulsa la identidad biológica. Es la vibración que mantiene
la unión entre las especies, lo que se ha llamado el inconsciente colectivo de
las especies, es decir es la forma como se reconocen los animales de una misma
especie para cumplir con sus funciones reproductoras. No posee diferenciación
individual, ni auto reconocimiento. En este nivel de conciencia no hay
referencia temporal espacial. La conciencia es lineal o bidimensional. A nivel
geométrico se corresponde con las formas planas como el círculo, el cuadrado
etc. Es la responsable de la variedad biológica y de todas las energías que se
encargan de propiciarla como las fuerzas elementales de la naturaleza.
La Tercera dimensión: Es
donde existimos los seres humanos, también es física y el tipo de conciencia de
esta vibración es volumétrica o tridimensional, a nivel geométrico se perciben
formas como el cubo y la esfera y los sólidos platónicos. Hay una percepción
lineal del tiempo y el espacio, con la capacidad de recordar el pasado,
proyectar el futuro estando en el presente. Se basa en la polaridad y la
ilusión de separación, en el desarrollo de la identidad individual y la pérdida
del sentido grupal. Esta es la frecuencia donde nos hacemos conscientes de
nosotros mismos, desarrollamos el ego y creemos que estamos separados del todo.
Es en esta dimensión donde nos percibimos más separados del todo que en ninguna
otra, por lo tanto es aquí donde al Ser Único se le presentan más retos de
integración y crecimiento.
La Cuarta dimensión: Es
la frecuencia donde regresamos a la conciencia de integración grupal, sin
pérdida de la individualidad. Esta frecuencia ha sido llamada zona arquetipal o
inconsciente colectivo, es el lugar donde residen los sentimientos, las
emociones y los sueños. En esta dimensión percibimos el tiempo en oleadas
cíclicas o en forma de espiral. Existe en un campo cuántico donde se presentan
simultáneamente todas las alternativas y posibilidades. Es la frecuencia de la
sincronicidad, la empatía y la telepatía. Es la última dimensión donde
experimentamos con el cuerpo físico como vehículo de aprendizaje. En esta
frecuencia percibimos la multidimensionalidad y nos damos cuenta de nuestra
responsabilidad, al hacemos consciente que cada una de nuestras acciones afecta
el todo.
En estos momentos nos encontramos
despertando a la conciencia de cuarta dimensión y la sentimos sobrepuesta sobre
la tercera, por eso a nivel humano estamos pasando por la necesidad de
compartir con grupos, revisar nuestras relaciones, buscar sanación y
crecimiento con terapias. También es la causa del desmoronamiento de
estructuras físicas, económicas y políticas por mucho tiempo establecidas, que
ya no se corresponden con esta nueva vibración. Y cada vez vamos a ver más
cambios a todos los niveles de aquello que no se corresponda con la nueva energía.
La quinta dimensión: Es
la frecuencia de la sabiduría y es totalmente pura energía. Es donde se
encuentran los Maestros Ascendidos y los espíritus guías. En quinta
experimentamos el fundirnos con el grupo de almas al cual pertenecemos
vibracionalmente y al Ser superior o Multidimensional. Es la dimensión donde
recordamos quiénes somos y despertando nuestra sabiduría interna. Es en esta
dimensión donde se experimenta la conciencia grupal que forma un solo Ser de
mayores dimensiones. Es una frecuencia energética, no física. El tiempo es un
continuo, solo existe el ahora eterno. Muchos de los seres que están en esa
dimensión al contactarse con su sabiduría, escogen ser los guías espirituales
de los que estamos en la dimensión física, como parte de su servicio en el
proceso de evolución. Muchos de los seres canalizados hoy en día que se
presentan como una conciencia de grupo están en quinta dimensión, así mismo
cuando hacemos contacto con nuestro Yo Superior estamos viviendo una
experiencia de quinta. Como es una dimensión de luz percibimos holográficamente
y en formas lumínicas de una gran intensidad, muchas veces geométricas.
La sexta dimensión: Es
la frecuencia que se ha llamado Crística o Búdica, porque es allí donde se
llega el estado de remembranza total, donde se toma responsabilidad por el todo
y se es el todo. Es un estado de conciencia compasiva, la famosa iluminación.
Es el regreso a casa, al Ser Único. En sexta el proceso de evolución del Ser y
el Todo se experimentan como Uno, es el lugar de la conciencia ilimitada y
unificada. Esta frecuencia se manifiesta como individual y colectiva
simultáneamente. La sexta dimensión es la creadora de las matrices morfogénicas
que se manifiestan en otras dimensiones como tercera, segunda y primera. Estas
matrices son las formas geométricas y las redes que llamamos geometría sagrada,
son los patrones geométricos de luz creadores de vida y responsables de su
materialización.
La séptima dimensión: Es
la frecuencia de la integración total, ya no quedan partes dispersas, la
conciencia se experimenta multidimensionalmente, es decir se tiene conocimiento
de las partes que alguna vez estuvieron desmembradas en el pasado con una nueva
perspectiva de integración. Allí se encuentran los seres que están y son puro
amor. Es una dimensión energética donde no existe la forma. Es la dimensión del
reino angélico y las conciencias de luz pura.